Como venimos haciendo en los últimos cursos, a principios de octubre volvíamos a reunirnos con todas aquellas personas que se incorporan al programa Agenda 2030 Escolar, bien sea como docentes o estrenándose en la coordinación. Incluso este año contábamos con la participación de docentes que, sin participar en el programa, querían conocer un poco más de nuestra metodología.

El objetivo principal de esta formación inicial no es otro que ayudarles a familiarizarse con muchos de los conceptos clave que utilizamos, así como acompañarles en estos primeros pasos que dan en sus centros.

Arrancábamos el lunes 9 de octubre con una sesión presencial basada en dinámicas y trabajo en grupo donde pudimos ahondar en qué queremos decir cuando hablamos de sostenibilidad escolar, reflexionar sobre la importancia que tiene el equipo dinamizador en el éxito del programa en el centro, o visualizar cuáles son las redes que hemos ido tejiendo y con las que trabajamos hoy en día.

En nuestra metodología el Comité de Sostenibilidad es fundamental, tanto por ser el órgano de toma de decisiones del programa en el centro como por su promoción de la participación escolar a todos los niveles. Es nuestra casa. Y con esa imagen jugamos a que cada una de las personas participantes eligieran qué tipo de casa representaba mejor su idea del comité: si una construcción de piedra antigua por su fortaleza, un tipi por la capacidad de adaptación o un edificio modernista por la innovación que supone.

Tras un ejercicio de concreción en el que fueron pensando en estos primeros pasos (qué clases y docentes que van a participar, cómo se elegirán a sus representantes, formas de conseguir la implicación de las familias…), pusimos el cierre a la jornada con una dinámica sobre la participación. Utilizando la escalera de Hart como referencia, el profesorado tenía que analizar diferentes frases, ver qué grado de participación había en ellas y posicionarse en uno de sus escalones. Con cada una de las argumentaciones, el movimiento entre escalones nos ayudaba a visualizar esos pequeños matices que hacen que un proceso sea realmente participativo, o cómo hay ocasiones en las que algunas de las dinámicas que tenemos asimiladas no favorecen la implicación de nuestro alumnado.

El pasado lunes 23 de octubre volvíamos a encontrarnos, esta vez en una sesión telemática para ver cómo han podido aplicar estos conocimientos en estas primeras semanas de curso y qué forma han ido tomando sus proyectos.

Es un gusto ver como cada año respondéis a esta convocatoria y esperamos que os sea de utilidad a lo largo de este curso (¡y todos los que vengan!).